
Podemos decir que estamos expuestos en Internet continuamente. Siempre que utilices redes sociales, realices una compra o te registres en un foro, de una u otra forma puedes estar exponiendo datos personales. En caso de robo, si llegaran a robar alguna de tus cuentas, podrías tener problemas. Sin embargo, en este artículo vamos a hablar de un robo físico, que también puede ser pérdida, de tu teléfono móvil.
Vamos a explicarte por qué ahora es un problema mayor para la seguridad. Te daremos también algunas recomendaciones para que puedas prevenir. El objetivo es dificultar el trabajo a los piratas informáticos, pero también a posibles ladrones que, de un simple tirón, te roben el teléfono por la calle.
Si roban tu móvil, el problema es importante
Vamos a suponer que han robado tu móvil o lo has perdido y alguien ha podido entrar en el teléfono y usarlo como si fueras tú. Un problema importante, es que vas a tener muchas aplicaciones iniciadas y sin necesidad de poner contraseña. Seguro que basta con pinchar en la aplicación de WhatsApp para entrar en tus conversaciones o ir al icono de Gmail y entrar en tu correo.
Esto es un problema, ya que van a pode suplantar tu identidad fácilmente. También hay que mencionar que el teléfono puede actuar como método de autenticación en dos pasos, ya sea al recibir un SMS o un código por correo electrónico, al cual van a poder acceder con facilidad y entrar en todas tus cuentas.
Además, es muy probable que tengas datos importantes almacenados. Por ejemplo, en alguna aplicación de notas o similares. Todo esto podría quedar expuesto, por lo que también podría afectar a otros si, por ejemplo, tienes archivos que contengan datos personales de otra persona o información confidencial de tu empresa.
Por otra parte, van a tener acceso a las fotos y vídeos que tengas en galería, tu lista de contactos, etc. Van a tener mucha más facilidad para suplantar tu identidad en redes sociales, crear perfiles con tu nombre y llegar a otros.
Cómo protegerte
Pero, ¿qué puedes hacer para protegerte? Algo que te recomendamos siempre, es utilizar un buen PIN o huella dactilar. Esto es lo que va a impedir que cualquiera, al robar el teléfono, pueda entrar en el contenido con facilidad. Lo mismo en caso de que pierdas el móvil por cualquier descuido.
Ahora bien, lo cierto es que no basta solo con esto. Por ejemplo, un robo habitual es, cuando vas hablando por teléfono, o bien usándolo por la calle, pasa alguien en moto, patinete o bici, te dan un tirón y lo roban. Lo tienes desbloqueado, por lo que no necesitan tu huella o PIN. Para reducir el riesgo, lo que te recomendamos es que bajes todo lo posible el tiempo de apagado de pantalla tras inactividad. No lo tengas en 30 segundos, que suele ser lo habitual, sino en mucho menos.
Por otra parte, siempre que sea posible, te recomendamos que habilites la autenticación en dos pasos en todas tus cuentas y tengas métodos de respaldo para poder acceder desde otro teléfono o dispositivo. Si roban tu móvil principal, al menos podrías reducir el daño y evitar así problemas.
En definitiva, hoy en día es un problema grave que te roben el móvil o perderlo. Es importante tomar ciertas medidas de prevención, para que el daño sea lo menos posible. Puedes utilizar aplicaciones 2FA, en vez de recibir códigos por SMS o e-mail, por ejemplo. No obstante, te recomendamos también configurar el móvil para que no muestren mensaje so notificaciones sin desbloquear.